Tinta invisible.

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Salto de blog en blog, todos ellos interconectados, algunos nombres ya me resultan conocidos, otros no tanto, metiéndome estos últimos en un bucle que me lleva de nuevo a la casilla de salida.

Leo.

Comento unas veces, me muero de envidia otras. Cientos, miles de aspirantes al oficio de escritor, que desparraman su talento, mucho o poco, en este pozo sin fondo que parece ser Internet. Muchos, probablemente, se sienten únicos, privilegiados poseedores del don de la palabra, la prosa o el verso. Algunos lo tienen, sin duda. Otros, no tanto. Y otros, están a años luz de rozarlo siquiera con la punta de los dedos. Pero todos tienen aquí su pequeño reducto, una página en blanco que rellenar y exponer después, dejándose la piel y las entrañas en escribir algo que, si bien puede no terminar de merecer la pena, por lo menos no avergüence a su creador cada vez que lo relea, dejando a la vista de todos un pequeño retoño recién parido, con la esperanza de que, al menos, no pase demasiado desapercibido.

El sueño de la literatura.

O quizás debería decir el veneno.

7 comentarios:

  1. Es un veneno como el aire que se respira, que también alimenta fuegos. Fuegos internos, por lo general.

    No sé qué es lo más inexplicable de todo: por qué se siente un deseo incontrolable de volcarse en palabras o por qué convertirlo en un acto de exhibicionismo. Sea como fuere, se va llenando este espacio (que no se sabe dónde existe) con letras, líneas, párrafos recosidos con más o menos pericia. Algunos consiguen hacerlo realmente bien.

    Aquí arriba, un ejemplo.

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  2. ... ni qué decir tiene...
    lo bueno de todo esto es que aquí, hagamos lo que hagamos, hacemos lo que nos gusta...

    gracias por tu visita a mi barrio, sé bienvenida...
    me gusta tu estilo, señorita Rock'N'Roll
    yo también me quedo por aquí

    un abrazo, besos
    au revoir!

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  3. Y que más da lo que hagas si mientras lo haces te sientes único y libre...Por escribo; mal, pero escribo.

    Me gusta tu blog, te sigo ;-)

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  4. Tienes una bonita forma de narrar las cosas. He leído un par de entradas y sí, he deducido que por tus venas corre ese veneno de la escritura que citas.

    Volveré con más tiempo.

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  5. Yo también pienso en esto muy a menudo... Somos muchos, y a veces me desespera, porque entre la enorme cantidad de textos encuentro muchos mejores que los míos.

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  6. Hago de tus palabras las mías... estaba pensando lo mismo hace poco. A veces, me dan un poco de celos, de ver montones de textos mejores que los míos, millones de formas de escribir tan diferentes y únicas, y aquí sigo yo siendo un horror en escribir, como siempre. Pero tengo esperanzas de que algún día mejoraré. Oye, me gustó harto tu forma de escribir, de expresarte y tienes toda la razón en tu última frase..."O quizás debería decir el veneno." Nunca lo había pensado así concretamente, con esas palabras, pero lo había pensado subjetivamente, y me di cuenta de esto hace poco. Suerte!

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  7. Creo que la necesidad de escribir es para muchos la auténtica droga que nunca podremos dejar.
    Realmente nunca he intentado desengancharme y creo que si un día llegara a tomar semejante decisión, lo tendría francamente dificil.

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